Atentos a la salud bucodental de los niños confinados
La salud bucodental de los niños confinados no debe descuidarse. En una situación extraordinaria como la que vivimos es fácil relajarnos en el cumplimiento de las rutinas más saludables. Especialmente, si tenemos en cuenta que el confinamiento provocado por la crisis del Covid 19, afecta también al estado de ánimo de padres y madres. Sin embargo, como dentistas en Oviedo con larga experiencia en prevención y tratamientos dentales para niños, no podemos dejar de hacer hincapié en la importancia de esas rutinas. Estos son algunos consejos para no bajar la guardia estos días.
Regularidad en el cepillado diario
Mantener la frecuencia en el cepillado y hacerlo siempre a la misma hora. No podemos permitir que los horarios trastocados afecten a la rutina del cepillado. Los niños deben cepillarse los dientes al menos dos veces al día. Una después del desayuno y la otra antes de irse a dormir. No es negociable, y es la mejor manera de evitar el riesgo de caries o enfermedades de las encías. Y también después de ingerir alimentos ricos o en azúcar, y cepillarse incluso después de tomarse un jarabe, como ya hemos comentado aquí.
Repaso de las técnicas de cepillado
Una buena manera de entretener a los niños puede ser realizar con ellos un repaso de las técnicas de cepillado. Hacer del cepillado diario un momento divertido ayuda mucho. Una demostración lúdica por un adulto, un concurso a ver quién sigue todos los pasos o cualquier manera de concentrar su atención en el modo de cepillarse servirá. Para empezar, comprobaremos el buen estado del cepillo y su conveniencia o no de cambiarlo por otro. Después, repasaremos cómo aplicar la cantidad adecuada de dentífrico (del tamaño de un grano de arroz para menores de tres años o de un guisante para los mayores). Y finalmente, una buena demostración sobre cómo hacer un cepillado circular que implique todas las piezas y sus caras internas.
Controlar las comidas entre horas
Las comidas a deshoras o la ingesta esporádica de dulces, acelera el riesgo de aparición de caries. Y los pequeños de la casa son muy dados a hacerlo sin el control de los adultos. Es preciso evitar las visitas intempestivas a la nevera o la despensa por puro aburrimiento. Si los adultos ya somos propensos, los niños aún lo son más. Y nada de esto beneficia a la salud bucodental de niños ni adultos.
Estar atentos a los primeros síntomas
En Bousoño Vargas, como dentistas en Oviedo, atendemos aquellos casos de urgencia que, por su naturaleza, no puedan ser diferidos en el tiempo, haciendo de la visita al dentista algo imprescindible. Para evitar daños mayores es aconsejable estar atento a las posibles quejas de los niños. Muchos problemas en dientes o encías suelen cursar con inflamación y dolor. Una llamada al dentista, comentando los síntomas puede ser la mejor solución para saber cuándo deberemos llevar al menor a la clínica dental para su tratamiento.